Stickers y racismo 1

Una vez una maestra me dijo: “¿ A tus papás no les da vergüenza haberte puesto ese nombre de perro?”, refiriéndose a mi nombre. Y es que nos enseñaron a sentir vergüenza de ser quien somos. Desde que nos dijeron que nuestros abuelos eran unos salvajes que sacaban corazones y se les comían en el desayuno. Y no nos dijeron que nuestros abuelos construyeron una ciudad en un lago que nunca se inundaba. O que construyeron pirámides más grandes que las de Giza, en Cholula.

El racismo ya como un discurso, ya como una ideología, funciona en México a partir del siglo XVIII, dándole todos los atributos negativos a las personas de la “raza” que en ese entonces decían negroide, o de las razas que decían indígenas o de américa. Entonces se empieza a hacer toda una ideología que lo que hace es justificar que hay razas inferiores y por eso hay que someterlas”.