Los muros de Buenos Aires han sido utilizados por los artistas callejeros en las últimas décadas como un medio de expresión y de esquivar la represión de la dictadura.
La tradición de Street Art en Buenos Aires se entiende desde el apoyo que la ciudad y los habitantes siempre han prestado a los artistas. Muchas veces eran los propios empresarios locales los que contrataban a artistas para que pintaran en los muros de sus comercios, para así reclamar como suyos unos espacios que la propaganda política había invadido sin piedad